En las familias donde hay niños es indispensable contar con vallas para piscina como medida de seguridad. La instalación de una valla nos dará tranquilidad ya que la piscina estará cercada y los menores no podrán acercarse ni caerse en ella. Además, de esta forma impedirás el paso a las mascotas y estarás previniendo posibles caídas o juegos que acaben con un susto dentro de la piscina.

Como hemos dicho, la piscina es una instalación peligrosa para niños y mascotas. Las vallas para piscina nos ayudarán a evitar cualquier tipo de accidente o caídas indeseadas al agua.

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Tipos de vallas para piscina según sus materiales y diseños

• Vallas tipo red o malla

Este tipo de vallas para piscina son las más económicas y fáciles de instalar. Se pueden encontrar en varias alturas y colores para personalizarlas a nuestro gusto y en concordancia con la decoración del patio o jardín. Uno de los puntos a favor de este tipo de vallas es que son fáciles de montar pero aún más fáciles de desmontar. Lo que dependiendo de tus necesidades puede ser una ventaja. Por ejemplo, si tienes una casita de verano, puedes desmontar las vallas al final de las vacaciones y volver a montarlas el verano siguiente. Así evitarás que se desgasten y se deterioren por las inclemencias del tiempo.

• Valla metacrilato

Las vallas de metacrilato son unas de las más elegidas, por el respeto que mantienen hacia la estética original del jardín, ya que al ser transparentes no alteran el entorno natural. Estas vallas vienen reforzadas con una estructura de aluminio y son personalizables pues pueden solicitarse a medida o cortarse. Son vallas de una alta seguridad que cercarán la entrada a la piscina evitando los accidentes.

Se trata de vallas con una alta resistencia al impacto, a la intemperie y a los rayos ultravioleta. Tiene una duración estimada de 10 años de exposición exterior sin envejecimiento. Sin embargo, habrá que tener cuidado con su uso pues una gran desventaja de este tipo de vallas es que se rayan con facilidad.

• Valla cristal

Son por excelencia las más elegantes y exclusivas. Las vallas de cristal con postes de aluminio lucen en cualquier jardín aumentando la sensación de amplitud y permitiendo que se aprecie el interior de la piscina. La inversión inicial para adquirir este tipo de vallas es fuerte debido a la gran calidad de los materiales. No obstante y debido a su gran resistencia, la inversión será rentabilizada pues se trata de un material duradero, difícil de rayar y que implica un escaso mantenimiento.

Como contrapunto, podríamos indicar que las vayas de cristal presentan una desinstalación muy complicada por lo que tendremos que tener claro antes de lanzarnos a su instalación si queremos la valla como un elemento decorativo “casi” definitivo o si por el contrario queremos una valla temporal.

• Valla metálica

Las vallas metálicas están disponibles en aluminio, acero o forja en diferentes tamaños y colores. Proporcionan una imagen elegante a la par que sofisticada. Su instalación es sencilla y se puede realizar sobre hormigón o sobre una placa base. Las vallas metálicas requieren de alguna labor de mantenimiento como pequeñas limpiezas puntuales para evitar que se acumule la suciedad. Además, igual que sucede con el metacrilato, hay que ser cuidadosos pues son materiales que pueden terminar rayándose a causa de un mal uso.

Las vallas de metal hay que elegirlas prestando especial atención al diseño ya que hay algunos que por su estructura y motivos, facilitan que los niños puedan saltar la valla accediendo a la piscina.

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No obstante, recuerda que elijas la valla que elijas, las vallas para piscina son únicamente un elemento disuasorio para los pequeños de la casa. Recomendamos no perder de vista a los niños en ningún momento por si pudieran tener un percance en las instalaciones de la piscina.