¿Por qué beneficiarnos de la aromaterapia sólo cuando vamos al spa? La aromaterapia consiste en utilizar los aceites esenciales de las plantas para mejorar nuestra salud mental y física. Lo bueno de la aromaterapia es que la podemos utilizar en cualquier lugar, en nuestra casa, en la oficina, etc., y podemos hacer uso de ella tanto como en perfumes para el hogar como incienso.
Hay que saber que cada aroma provoca en el organismo un determinado estímulo por lo que deberemos saber sobre qué queremos incidir a la hora de elegir un aroma u otro.
A continuación os decimos cuáles son los aceites esenciales más comunes y sus usos:
Eucalipto: ideal para la descongestión nasal. También es útil para acabar con gérmenes presentes en el aire.
Lavanda: posee una propiedad equilibradora. Supone una ayuda en casos de estrés, insomnio, depresión y dolores de cabeza.
Vainilla: es estimulante y revitalizante del ánimo.
Jazmín: está especialmente indicado para personas nerviosas y con ansiedad. También ayuda en estados depresivos o de falta de atención. Aporta euforia y confianza.
Canela: Disminuye el cansancio y el estrés y es utilizado como afrodisíaco por sus propiedad estimulantes.
Coco: aplaca los síntomas de fatiga e insomnio. Estimula la mente.
Frutos rojos: aroma sensual y relajante que aporta positividad y equilibrio.
Azahar: Su aroma es relajante y ayuda a mitigar el dolor menstrual, de cabeza y de estómago. Calma en momentos de nerviosismo y o alteraciones emotivas.
Tomillo: aumenta el sistema inmunológico. Es energizante y fungicida.
Romero: Tiene propiedades analgésicas y es un aliado útil para catarros, bronquitis y asma.