Seguro que has escuchado y leído mucho sobre el Feng Shui pero puede que todavía no hayas intentado introducirlo en tu hogar. El Feng Shui utiliza colores, los cinco elementos, símbolos de animales y números para crear armonía, que la energía fluya en nuestras casas y repercuta en nosotros. Dale unas pinceladas Feng Shui a tu hogar.
Para empezar puedes optar por introducir pequeñas cosas para que el Feng Shui beneficie tu estado físico y mental y no tener que hacer un gran cambio en la decoración de tu dormitorio, cocina, recibidor, salón, etc.
Los colores más utilizados son los colores claros y pasteles que aportan luminosidad y sensación de relax. Por otro lado, el color rojo aporta suerte, el amarillo, energía, el morado, creatividad y los colores tierra, seguridad. Una recomendación del Feng Shui es plantar flores rojas a la entrada de la casa para atraer el dinero y un colgante musical para atrapar la energía.
Es importante tener en cuenta que cuantos menos objetos y muebles se tengan más se estará acorde con la filosofía del Feng Shui. Una casa cargada absorbe demasiado la atención y, por tanto, la energía. La sencillez es fundamental, libera el recibidor, el salón, tu dormitorio, etc., de todo lo innecesario y deja sólo lo imprescindible, verás la casa más ordenada y ello eliminará el estrés.
La buena iluminación (si es natural mucho mejor) y las plantas, que ayudan a purificar el aire, no pueden faltar en tu casa feng shui. En el salón también es muy importante colocar sofás y sillones de manera que inviten a la conversación, deben formar un ángulo de 90º o estar enfrentados. Olvidémonos de colocarlos en línea recta y de cara a la televisión.