Fregadero o ducha atascada, grifo que gotea, cisterna estropeada… No creas que sólo ocurre en tu casa, se trata de las averías de fontanería más comunes. Pero estamos de suerte, ¡también son las más fáciles de solucionar!
Cisterna estropeada
El mecanismo de la cisterna es sencillo y soporta el uso frecuente. Pero en algunos casos los materiales se deterioran o la falta de delicadeza en su uso hace que se estropeen.
La avería de una cisterna puede variar mucho. Desde que el mecanismo no funcione correctamente y la cisterna no cargue agua, a que tenga fugas.
Si tu cisterna no carga agua seguramente se deba a que el flotador se ha quedado subido. Solucionarlo es bastante fácil. Desenrosca el pulsador de la cisterna y quita la tapa. En un lado de la cisterna verás el flotador, intenta bajarlo cuidadosamente con la mano hasta que entre agua. ¡Ya estaría solucionado!
Si por el contrario, notas un continuo y molesto ruido de la cisterna es probable que tengas una fuga. En este caso, desmonta la cisterna, aprieta el tornillo del flotador para comprobar si está bien regulado ya que este puede ser el problema. Si el flotador está correctamente, cierra la llave de paso para vaciar la cisterna y retira la válvula de entrada de agua, compuesta por el brazo y el flotador. Desenrosca la tuerca de plástico que hay sobre la válvula y quita la zapata de la válvula de entrada. Si está en mal estado sustitúyela por una nueva. En la mayoría de los casos el deterioro de la goma es el causante de muchas fugas de agua. Al terminar monta el mecanismo de nuevo.
¡Primera avería de fontanería solucionada!
Grifos que gotean
Por su continuo uso, por una mala instalación o por envejecimiento, los grifos suelen ser uno de los elementos del hogar que sufren más averías. Una correcta instalación, ni demasiado ajustado para que no se dañe ni flojo para que no se suelte, evitará muchos problemas.
Para arreglar el grifo primero cierra la llave de paso. Retira el embellecedor y la llave del grifo. El siguiente paso es desenroscar la válvula y sacar la junta de estanqueidad. A continuación sustituimos la pieza de goma por una del mismo diámetro. En este paso puedes aprovechar para cambiar también las juntas tóricas. Como último paso, vuelve a montar el grifo apretando todas las piezas.
¡A por la siguiente avería!
Tuberías atascadas
Otro problema muy común en la mayoría de las casas es el atasco de tuberías del fregadero o la ducha. Para solucionarlo puedes usar productos desatascadores. Estos productos suelen ser muy fuertes por lo que te recomendamos utilizarlos con mucho cuidado. Otra opción son los desatascadores mecánicos como el chupón.
Recuerda que para evitar el atasco de tus tuberías no debes echar residuos por el fregadero o la ducha.
Con esto ya puedes solucionar las averías de fontanería más típicas. Recuerda que un correcto uso y el mantenimiento adecuado de la cisterna, grifos y tuberías evitará problemas mayores. Si prefieres dejarlo en manos de profesionales, en ASSISTA HOME contamos con servicios de fontanería a precio cerrado para cualquier avería.