El edredón es un elemento imprescindible del invierno y presente en la mayor parte de los hogares. Al ser prendas voluminosas y de rellenos delicados necesitan un lavado especial y guardarlos de forma correcta en el cambio de temporada para evitar olores desagradables.
Aunque mucha gente crea que es imposible lavar el edredón nórdico en casa puesto que la recomendación es lavarlo en seco, no siempre es así.
Antes de intentar lavarlo en casa deberemos leer bien la etiqueta, pero lo cierto es que la mayoría pueden meterse en la lavadora.
¿Cómo lavar el edredón nórdico en casa?
El requisito principal es contar con los electrodomésticos necesarios para la tarea. Sólo necesitaremos tener una lavadora con capacidad grande (que no quede muy aprisionado dentro del tambor) y una secadora o espacio amplio en casa donde extenderlo para secarlo.
A la hora de lavarlo, utiliza un programa suave y siempre en agua fría. Sácalo inmediatamente después de que termine el programa. De este modo evitaremos que se arrugue más de lo necesario. Puedes utilizar tu detergente habitual y suavizante, así como un poco de lejía para prendas, en caso de que el edredón sea blanco, para conseguir mayor blancura.
Si utilizas secadora, mételo con bodas de secado o con dos o tres pelotas de tenis (nuevas por supuesto) para evitar que el relleno se apelmace.
¡Verás cómo una vez seco tu edredón luce igual de esponjoso y limpio que el primer día!
NOTA: No te asustes si al sacarlo de la lavadora se ha quedado más plano y con un tono grisáceo. Desaparecerán ambos síntomas una vez seco.