Para evitar el costoso mantenimiento de la piscina durante el invierno teniendo que vaciarla y limpiarla, o bien, depurar el agua continuamente, la mejor opción es la llamada hibernación, más barato y ecológico. Con él podremos conservar el agua para la siguiente temporada sin que se contamine ni se ensucie. Es importante saber que para aplicar la técnica de hibernación, el agua debe permanecer en una temperatura inferior a los 15 grados centígrados.
Mantenimiento:
Para un correcto mantenimiento deberemos comprobar que el sistema de filtrado esté en perfecto estado para su uso y hacer una filtración de unas 4-5 horas a la semana. El motivo de hacer esto es, más que para que no se estropee el agua, para que la bomba no esté parada durante meses y se pueda estropear. Después deberemos tratar el agua con cloro o bromo, que utilizaremos en menor cantidad que en verano y una media de 8 horas a la semana.
Un paso que tampoco hay que saltarse es la utilización de desinfectante de cloro o alguicidas que utilizaremos dos veces en la temporada de invierno. Una al comienzo y otra al final. Este paso es imprescindible, sobre todo si la piscina está rodeada de vegetación, ya que evitará la descomposición. Si se acumulan hojas o tierra lo mejor es quitarlas con recoge hojas o, si está muy sucia, usar el limpia fondos automático.
Si nos encontramos en una zona muy fría, con el riesgo de que el agua se congele, un método efectivo es colocar un objeto flotante en la piscina, éste con el movimiento evitará la congelación.
No deberemos descuidar el Ph del agua que deberá estar siempre entre los valores 7.2 y 7.6, así tendremos la piscina siempre a punto para su uso.
Si necesitas de algún servicio o asesoría para el mantenimiento de la piscina, no dudes en llamarnos o consultarnos. La consulta es gratuita y ajustable a tus necesidades. Llama al 902 12 12 32 – 96 317 69 15.