A casi nadie le gusta planchar y por ello, menos aún limpiar la plancha cuando ésta se ensucia. No obstante, la limpieza de la plancha es fundamental para no traspasar las manchas acumuladas en ella a la ropa. ¡No te preocupes! Aunque no te lo creas, ¡limpiarla es muy sencillo!
Para eliminar la suciedad incrustada en la superficie de la plancha lo único que tienes que hacer es coger un trapo limpio que no vayas a utilizar, doblarlo y meterle en el interior sal gorda. Plancha por encima de la sal con la máquina en caliente y verás cómo las manchas desaparecen en el acto.
Para quitar materiales sintéticos que hayan quedado adheridos a las planchas de vapor, el procedimiento es distinto. Calienta la plancha a una temperatura mínima, desconecta la salida del vapor y frota la base donde se encuentre la mancha con una vela. La cera de la vela obstruirá los orificios de tu máquina. ¡No te asustes! Ésta desaparecerá a continuación cuando conectes de nuevo el vapor. Pero antes de esto, pasa una lana de acero fina por la superficie. Ahora sí, conecta el vapor pulsándolo de forma reiterada hasta conseguir eliminar los restos de cera en los orificios.
Finalmente, usa una prenda que no quieras para pasarle la plancha sobre ella y asegurarte de haber eliminado toda la cera.
¡Listo!
Sigue estos consejos y aumentarás la vida útil de tu aparato con una simple limpieza de la plancha.