El trabajo, las obligaciones familiares, las citas con los amigos o la pareja… A la semana, y sin apenas darnos cuenta, realizamos un montón de actividades laborales y de ocio que nos reducen el tiempo que dedicamos a las tareas del hogar.
Entre todas ellas, la plancha es una de las que solemos abandonar con más frecuencia porque no se sitúa entre las primeras necesidades, por la pereza que nos da, y cuando queremos darnos cuenta nos encontramos ante una montaña de ropa por planchar.
Para que esto no nos ocurra, vamos a proponer una serie de consejos prácticos que ayudan a no llegar a ese extremo. ¡Al menos, de forma tan rápida!
Trucos para quitar las arrugas de la ropa sin plancha
– Presta atención a la hora de tender la ropa cuando la sacas de la lavadora. Si la tiendes con cuidado, procurando que la raya del tendedero ocupe la menor parte de la prenda o ubicándola en una zona estratégica que disimule después esta arruga, te quitará muchas prendas para planchar.
– Una de las formas más habituales para planchar la ropa ligera sin sacar la plancha es colgarla en una percha en el baño mientras nos duchamos. El vapor que se genera en el cuarto de baño junto con el peso de la gravedad actúan de planchado.
– En los meses de calor podemos optar por meter la ropa en el frigorífico durante diez minutos aproximadamente y después colocárnosla encima. Nuestro calor corporal, que contrarrestará con la temperatura que han adquirido las prendas, hará que la ropa se planche de forma natural.
Estos consejos quizás no sirvan con las arrugas más persistentes, pero sí con aquellas prendas que cuenten con una buena caída y sean más flexibles. Si deseas seguir informándote sobre más trucos acerca del planchado, lee esto.